“Templo” El nuevo libro de poemas de Alan Smith se presenta en Puerto Rico

En la Revista Trasdemar difundimos la creación literaria contemporánea

Presentamos en la revista Trasdemar el lanzamiento editorial del nuevo libro de Alan Smith Soto (Costa Rica), colaborador de nuestra revista, titulado “Templo”y publicado por Huerga & Fierro con primera edición en 2024, la novedad literaria será presentada en la Librería Laberinto de San Juan de Puerto Rico, hoy lunes 13 de enero, a partir de las 5pm, con la participación estelar de los autores Mercedes López Baralt, Miguel Ángel Fornerin y Juan Casillas Álvarez, quienes acompañarán al poeta. Incluimos en primicia una selección de poemas del libro “Templo” de Alan Smith en nuestra sección “Continentes” de literatura contemporánea en español.

Alan Smith es autor de libros como “Fragmentos de alcancía“, “Libro del lago” y “Hasta que no haya luna”, publicados por la prestigiosa Huerga & Fierro. Ha sido profesor de la Universidad de Boston y es uno de los grandes especialistas en la obra de Benito Pérez Galdós.

La ilustración de portada del libro es la obra plástica “Ordenando” de Natalia Auffray, reconocida artista multidisciplinar que actualmente reside en Madrid

El templo permanece sagrado cuando los dioses se han ido, reza el epígrafe de Schiller, en paráfrasis de Menéndez Pelayo, que saluda al lector en este Templo, cuarto poemario de Alan Smith Soto. La naturaleza, tema recurrente en toda la obra de este poeta, es nuestro lugar, nuestra ocasión, nuestro ser. Madrid, Boston, San José, Turrialba, calles y prados, panaderías, palmeras, caminantes, desahuciados, felices y rotos, asesinos y asesinados, arlequín y nube, y hasta cierto gatito de la madrileña calle del Humilladero, pueblan este Templo con todo su sagrado desamparo, su querencia y su querer.

Huerga & Fierro
TEMPLO

Venimos del bosque
a este claro de hierba
tascada por el ganado.
Subimos las soleadas
paralelas de piedra
y pisamos su pórtico ensombrecido
por la brisa:entramos.
Las losas gastadas por la ausencia
reclaman nuestra descalcez,
la columnata
remeda con su mármol
al más antiguo templo
que con su silencio nos rodea;
hanse deslizado algunas hojas
hasta nuestros pasos,
      ni antes,
                     ni después.

EL PAN PERDIDO

¿Dónde romperá
en pedazos
su gran arenga?
¿en qué mantel, 
junto al pliegue de una plancha hacendosa,
abrirá su morona
más lenta que la muerte?
Nadie lo busque,
pues se ha perdido
al recoger el tiempo,
pero, si por casualidad doblas la esquina
donde el filo se puso huérfano
y nada puedes,
allí estará contigo y conmigo. 

HAIKU

Llegó el silencio
hasta la mariposa,
abrió su ala.

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