Desde la Revista Trasdemar presentamos nuestra entrevista con Fernando Álamo (Santa Cruz de Tenerife, 1952) Artista, Premio Canarias de Bellas Artes en 2014, fue nombrado Hijo Adoptivo de Las Palmas de Gran Canaria en 2010. Cursó estudios en la Escuela Superior de Bellas Artes (1970-1973). En 1972 realiza su segunda exposición individual en los sótanos del Castillo de Paso Alto, a la vez que se introduce en el mundo de la escenografía para diversos grupos de teatro y danza, realizando con su obra una gira con el grupo La Cuadra de Sevilla por diversos teatros de Cataluña. Su obra se ha mostrado desde entonces en multitud de salas tanto de manera individual como en exposiciones colectivas, entre otras en la Galería Santo Fícara de Florencia, Galería Estampa de Madrid, Pascal Retelet de Bruselas, Andreas Bastian de Munich, Jerusalem Artists House de Israel, Convento de San Francisco de Asís de La Habana, Museo Sofía Imbert y Museo Jacobo Borges de Caracas, Ape Gallery de Nueva York. Así mismo, participa en Ferias de renombre como Arco, ArtMadrid o Estampa, con presencia en ciudades como Lisboa, Buenos Aires, Caracas, Basilea, Dakar o Bolonia. Su obra ha sido expuesta en las galerías Magda Lázaro, Bibli, Artizar, Manuel Ojeda, Galería Vegueta, Sala Attiir, Radach Novaro, Sala Conca, Gabinete Literario, Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, TEA Tenerife espacio de las Artes, CAAM Centro Atlántico de Arte Moderno o Fundación La Caja de Canarias. Ha realizado numerosas intervenciones en edificios públicos, tales como Teatro Guiniguada, Edificio de Exportadores FEDEX, Paseo de Las Canteras, Calle Olof Palme de Las Palmas de Gran Canaria, Presidencia del Gobierno de Canarias, Hotel Escuela de Santa Cruz de Tenerife o The Door en Karlsruhe, Alemania. Agradecemos al artista Fernando Álamo su colaboración en nuestra serie de entrevistas a creadores insulares contemporáneos
¿Cuál es su vínculo creativo con el panorama de la expresión artística en las islas? ¿En qué ámbito de las artes se encuentra actualmente y cuál ha sido la génesis de su formación?
Mi aprendizaje se inicia a finales de los años 60 principio de los 70, a raíz de mi ingreso en la Escuela Superior de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife dónde tengo la suerte de tener como profesores a dos artistas muy influyentes en ese momento, Pedro González y Enrique Lite que son componentes del grupo Nuestro Arte. Eso me permite asistir a las exposiciones organizadas por este grupo en el Museo Municipal de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife y conocer a algunos de los fundadores de la mítica revista Gaceta de Arte de tanta trascendencia e importancia en el panorama artístico español. Allí coincidía con Eduardo y Maud Westerdhal, Pedro García Cabrera o Domingo Pérez Minik entre otros.
Al poco tiempo realizo mi primera exposición en el Ateneo de La Laguna y empiezo a trabajar con la que será la galería privada y profesional más importante de Canarias de esos años y que va a tener gran repercusión en el panorama artístico regional.
Allí exponían Pedro González, Walter Meigs, Maribel Nazco, José Abad, José Luis Fajardo, Ventura Alemán, Ernesto Valcárcel, Lourdes Crespo, Tony Gallardo, Per y Birgitta Lillieström entre otros muchos y se reunían amigos, poetas y críticos como Octavio y Antonio Zaya, Carlos E. Pinto, Carlos Díaz-Bertrana, Arturo Maccanti y un largo etc. En esos años colaboro y participo activamente con alguno de los grupos de teatro y danza más experimentales que existen en ese momento en las islas para los que realizo escenografías, etc.
En la actualidad sigo trabajando con las galerías e instituciones que solicitan mi obra, experimentando con nuevos materiales y formas de expresión dentro de la pintura como soporte principal, recientemente en uno de los espacios más interesantes del panorama artístico de las islas BIBLI he realizado junto a Jiri George Dokoupil una exposición hecha con obra dual como nueva forma de expresión conjunta y que no dudamos en trasladar a otros espacios. También hace pocas fechas realicé una exhibición llamada “Los maestros de sushi “ en la Fundación Canaria para el Desarrollo de la Pintura que reunía un gran número de obras en torno a uno de los temas recurrentes en mi obra (natura morte) y el mundo del coleccionista como uno de los actores principales del mundo del arte contemporáneo.
Háblenos de su obra. ¿Qué papel ha constituido la insularidad para los procesos de creación en su trayectoria profesional? ¿Qué representa para usted el horizonte insular a la hora de la proyección pública de su actividad artística?
Si bien en mis inicios profesionales el horizonte insular era un auténtico desierto dónde no existía la más mínima posibilidad de proyección exterior salvo que te trasladases a vivir fuera como hicieron tantos artistas e intelectuales de Canarias y dónde ni siquiera podías acabar la carrera de Bellas Artes en las islas ya que la Escuela dependía de la de Sevilla o que fueras a terminarla en alguna de la Península.
Si a esto le añadimos la ausencia de galerías, revistas, tiendas especializadas en materiales, etc. salir adelante en este panorama era desolador. Gracias a la labor tenaz de los artistas anteriores, al incipiente coleccionismo, a la irrupción de nuevas galerías y a la llegada de la democracia a nuestro país, las cosas empezaron a cambiar poco a poco. Surgen nuevas revistas Papeles Invertidos, Blanco, Balcón, Hartísimo, Baobad, Liminar, etc. impulsadas o por la iniciativa de gente de una edad similar a la mía.
Empiezan también las exposiciones institucionales promovidas por los gobiernos regionales del momento, que nos permiten enseñar nuestra obra en otras ciudades y empiezan a llegar a las islas exposiciones de otros artistas que nos permiten conocer galerías y artistas de otras latitudes, gracias a eso el horizonte parece ensancharse.
No es fácil elegir entre tan pocas opciones, o te vas o te quedas con todas las consecuencias que esto implica, yo elegí quedarme, quedarme con mi circunstancia personal – familia, entorno. A la vez tuve la fortuna de empezar a trabajar con otras galerías Galería Estampa de Madrid, Santo Ficara en Florencia o Andreas Bastian en Alemania, esto me ha permitido seguir trabajando en las islas y exponer mi obra en otros lugares. A lo mejor si me hubiese ido, estaría tal vez en otras circunstancias, quien sabe.
En la tradición cultural de las islas ha existido un diálogo histórico entre la literatura y las artes ¿Qué libros puede citarnos de la literatura insular que han influenciado en su propia creación personal? ¿Cuál es su consideración acerca del panorama actual de los libros y qué posibilidades hay de conexión entre la literatura y el arte desde su perspectiva
Desde mis comienzos mi relación con el mundo de la literatura ha sido bastante estrecha por la amistad con gran parte de los poetas y escritores de las islas, ilustrando poemarios, realizando portadas para libros o diseñando y colaborando con muchas de las revistas publicadas en Canarias.
Sin duda hay dos libros que han sido una referencia constante y de una gran influencia en mi obra son “Media hora jugando a los dados” de Agustín Espinosa y “El enigma del Invitado” de Emeterio Gutiérrez Albelo de los que he realizado con la galería Estampa alguna edición de autor.
La relación entre literatura y arte siempre dependerá de los intereses comunes de artistas y escritores, me imagino que dependerá del tipo de obra que se planteen cada uno y a que intereses personales obedezcan.
Las nuevas tecnologías y las redes sociales están protagonizando las nuevas formas de expresión y de escritura contemporáneas ¿Qué opina sobre las narrativas digitales y los modos de consumo cultural hoy en día? ¿Cree que es posible un renacimiento cultural desde las islas?
Creo que además de nuevas formas de expresión no sólo en la escritura sino en todo tipo de manifestación y en la democratización de los instrumentos necesarios para acometer cualquier actividad artística y en la difusión de la misma. Ocurrió ya hace unos años con la irrupción de internet, los ordenadores y el soporte digital. Dejó de ser necesario la especialización en la fotografía analógica o tener grandes conocimientos de cine para poder expresarse por estos medios, si a esto le unimos la facilidad e inmediatez de reproducción tenemos un panorama absolutamente distinto al de hace no muchos años.
Los renacimientos siempre serán posibles mientras haya actores capaces de llevarlos a cabo y gestores que faciliten su distribución y difusión. En mis inicios no hace tantos años se hablaba de la muerte de la pintura y no sólo eso sino que si no hacías lo que en ese momento se consideraba arte abstracto no te auguraban mucha vida artística por delante. Ya hemos visto que esto no quedó en nada.
Veo muy difícil que este renacimiento ocurra desde Canarias porque los centros de influencia del mundo del arte están a muchos kilómetros de aquí, pero si es posible que con el talento y capacidad de las nuevas generaciones de artistas algo se avance en ese sentido.
¿Cuál es su experiencia de diálogo y de convivencia entre creadores en el ámbito de su disciplina artística? ¿Qué papel considera que desempeñan las instituciones culturales del archipiélago? ¿Cuál podría ser su recomendación o aportación personal para mejorar la realidad cultural, artística y literaria de su entorno y de las islas? Muchas gracias
Por mi parte creo que este diálogo ha sido bastante fluido dentro de la individualidad propia de mi profesión, desde siempre he tenido la suerte de transitar entre diferentes formas de expresión, léase danza, teatro, literatura, colaborando o siendo asistente en ocasiones puntuales de otros artistas. Con Guinovart en su exposición del Colegio de Arquitectos de Tenerife en los años 70, con Luis Gordillo en los Talleres de Arte Actual en los 80, en la actualidad compartiendo con jóvenes artistas alguna exposición conjunta o teniéndolos como colaboradores en algún taller.
La realidad cultural de las islas creo que se puede mejorar facilitando que los creadores de Canarias lleguen sin ningún tipo de problemas aduaneros y de sobrecoste a la hora de enviar su obra a otros sitios, de facilitar que las pocas galerías que quedan en las islas puedan con sus artistas asistir a ferias, encuentros, etc. de una manera similar a lo que ocurre en otros lugares.
Incentivando el coleccionismo con una ley de mecenazgo que ya es hora que aplique algún gobierno y también permitiéndonos a los creadores vivir de nuestro trabajo, venta de cuadros, royalties, derechos de autor sin la cantidad de trabas fiscales o pensiones ridículas con las que nos obligan a vivir, incluso cuando pagamos los impuestos correspondientes.