“Meditaciones del pez austral” Poemas de Daniel Bernal Suárez

Daniel Bernal Suárez es Director de la Revista La Salamandra ebria
Daniel Bernal Suárez

Presentamos en la Revista Trasdemar una muestra poética del autor Daniel Bernal Suárez (1984) Escritor, crítico literario y gestor cultural, recientemente ha sido galardonado en el concurso Nuevas Escrituras Canarias por el libro de poemas Meditaciones del pez austral (2020). Compartimos una selección de poemas realizada por el autor para nuestra sección “El invernadero”

Salí del agua, respiré

pensamientos incendiados,

óvalos de luz, semillas.

DANIEL BERNAL SUÁREZ

MENÚ DEL DÍA


Acontece la primera visión: la pradera azul del mar y arriba los jirones de un cuerpo espumoso que se desencaja en nubes. Más abajo la ventana muestra el afanoso bullir de la especie: las bocinas marcan el compás, los transeúntes atraviesan el asfalto, los árboles desencantados agitan sus ramas en protesta, las torvas palomas llevan en sus picos la prisión invisible. Una mujer tiende a lo lejos la ropa, unos muchachos fuman a escondidas. El primer signo de la vida es el dolor. Notas la rigidez de la espalda, el calambre incipiente resucita en ti el miedo agazapado a la hora blanca. Coges la taza familiar, la acercas a tus labios: en el fondo del líquido oscuro te aguarda la voluntad del día. No sorbes café: bebes el jugo amargo de la mañana, la promesa truncada de un nuevo nacimiento.


YO


Impávido medito frente a la sepultura del yo. El hocico sagaz del perro, amargos pétalos inscritos en la lumbre, corteza cruel que apabulla: todo cae sobre el eje de ese pez insulso que desconozco. La naturaleza del yo es, por esencia, masturbatoria. Huir de sus tentáculos es el único mandato que nos salva. Lúbrico e incestuoso, el yo se revuelca consigo mismo, se pavonea heraclitiano, anochece parmenídeo. No hay filosofía que escape a su carácter ubicuo. El poema puede ser, al fin y al cabo, su no imposible dicha. Con frecuencia, el brillo de sus heces. La muerte es una forma de venganza frente a su voluntad de perpetua consumación.


GUIJARROS (2)


Salí del agua, respiré
pensamientos incendiados,
óvalos de luz, semillas.

Yo soy el lenguaje de las máscaras.


ANOTACIONES DE UN DIARIO QUE NUNCA HA EXISTIDO


En la techumbre del mundo hay un ojo disecado, dos palomas muertas, una cena aún caliente, tres tentáculos de ángeles dormidos. Cruzo en ángulo siniestro, me interno en pasillos de hospitales que ignoran mi nombre, escribo para todas las farmacias la fórmula magistral del olvido. En la techumbre del mundo toco mi médula intacta y un dolor vertebral más intenso que la dicha me refleja en la noche férrea, en la pluralidad del pecado.


NO POÉTICA


Si la poesía es la poesía y no la mística
Si la poesía entonces la poesía es
Luego la poesía puede pero no entiende

Si el poema es un bloque
El bloque es sólido
Luego la solidez no es atributo de lo poético

Si la poesía es un lenguaje asombroso
Si el asombro revierte las relaciones del mundo
Entonces el poema es un pájaro inventado

Si la poesía produce éxtasis o no éxtasis
El éxtasis es un fenómeno sináptico
Entonces la poesía es un orgasmo mental


FRAGMENTOS DE REALIDAD


Costillar de salud, amplios bebedizos, fuerza de sustancias tocadas por el tiempo, resecas. Una mirada al sol, ceguera de las joyas, tribus adscritas al dominio de las grasas. Fecundidad de hortalizas, coito pegajoso. Tábanos, radicales pesadumbres: escuchas al gamo y su goteo de fuente que mana deliciosas asfixias, carnes congeladas. Todo fragmento de la realidad es cuerpo llagado por la incertidumbre. Claro espesor de agonías, regatea el suicidio en los mercados.


DE RERUM NATURA


¿Qué ley agónica dirime la cópula del cieno y de las nubes? Hago cálculos y yerro, yerro en demasía. Como si fuera un perro mutilado, lamo la cicatriz, mastico los números. Urdo en secreto mi inmolación a dentelladas.


GUIJARROS (7)


Digo «yo» y nada resuena
porque he sido en las noches sucesivas
afanado intérprete
de metamorfosis,
agua anterior al agua,
vegetación procaz,
página calcinada del sistema.

Portada del libro (Cortesía del autor)

Daniel Bernal Suárez (1984) Escritor, crítico literario y gestor cultural. Ha recibido, entre otros, los premios de poesía Ciudad de Tacoronte (2008), Luis Feria (2011) y Pedro García Cabrera (2013). Ha publicado los poemarios Escolio con fuselaje estival (2011), Corporeidad (2012), Odiana (2014) y El tiempo de los lémures (2014), y el volumen de microrrelatos Manual de crucificciones (2019). Recientemente ha sido galardonado en el concurso Nuevas Escrituras Canarias por el libro de poemas Meditaciones del pez austral (2020).

Textos suyos –críticos y de creación– han sido publicados en una veintena de medios y revistas especializadas de España e Hispanoamérica.

Ha impartido talleres de creación literaria en diversos espacios. Fue presidente de la Sección de Literatura y Teatro del Ateneo de La Laguna en el bienio 2017-2018 y ha ejercido labores de producción en distintos festivales de Canarias

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